Si eres un aficionado a la comida y la cocina japonesas, o incluso si has viajado a Japón, es bastante seguro que hayas probado alguna vez la sopa de miso. Es posible que hayas probado el miso instantáneo, listo en menos de un minuto y disponible en una gran variedad de sabores. También es posible que hayas preparado miso «de verdad», con pasta de miso. O puede que te hayan servido un cuenco con tu comida en Japón. Pero, ¿conoces cómo se hace el miso y cómo se utilizan los distintos tipos de miso?
¿Qué es el miso?
El miso (味噌, significa «fuente de sabor») se elabora mediante la fermentación de una selección de semillas de soja, arroz, cebada y trigo para crear una pasta espesa y con textura. Aunque todo el miso contiene algunos o todos estos ingredientes básicos, las diferencias en las combinaciones, proporciones y calidad de los ingredientes hacen que no haya dos pastas de miso exactamente iguales.
Aunque la forma más común de disfrutar del miso es mezclándolo con caldo dashi para hacer una sopa de miso, también se utiliza para salsas y adobos, así como un método para encurtir verduras y carnes.
El color del miso varía desde un marrón pálido similar al de la mantequilla de cacahuete hasta un rojo pardo intenso. Cuanto más oscuro sea el color, más largo será el proceso de fermentación y más fuerte será el sabor. La mayor parte del miso puede dividirse en tres categorías: miso blanco, miso rojo y una mezcla de ambos llamada awase miso.
Tipos de miso
Miso blanco
El miso blanco se elabora a partir de habas de soja y un alto porcentaje de arroz que se fermentan para crear un sabor ligero y ligeramente dulce. El suave sabor del miso blanco lo convierte en una opción popular en Japón, perfecta para sopas, aderezos y marinados para el pescado.
Miso rojo
El miso rojo se elabora a partir de habas de soja, cebada y otros granos con un largo proceso de fermentación para crear un sabor maduro, rico en sabores umami. El sabor intenso y salado del miso rojo lo convierte en una gran opción para sopas sustanciosas y marinadas para carnes y aves.
Miso Awase
El miso Awase suele ser una mezcla de miso blanco y rojo, lo que lo convierte en un ingrediente versátil, adecuado para todo tipo de cocina japonesa.
Miso de cebada
El miso de cebada se elabora con granos de soja y un alto porcentaje de cebada que se fermentan para crear un sabor espeso y saludable. Popular en las zonas del sur de Japón, el rico sabor del miso de cebada es ideal para las sopas tradicionales o como condimento para las verduras.
Pasta de miso con dashi
A algunas variedades de pasta de miso, ya sean blancas, rojas o awase, se les añade caldo dashi. Este tipo de miso suele ser la forma más fácil de hacer una auténtica sopa de miso, ya que no es necesario añadir ningún caldo dashi adicional. Basta con mezclar una cucharada de pasta de miso con agua caliente, añadir unas rodajas de cebolleta y cubos de tofu y ya está lista para comer.
Propiedades del miso
Bueno, en primer lugar… ¡el miso es delicioso! Tiene un rico sabor que es bastante difícil de describir, pero que puede calificarse de salado, sabroso, ligeramente dulce, terroso, a soja.
Además de su gran sabor, el miso es también muy saludable y tiene una serie de beneficios nutricionales. Tiene un alto contenido en fibra, proteínas y minerales, así como en vitamina K y B12, lo que lo hace excelente para el sistema inmunológico y el tracto digestivo.
El miso es realmente uno de los llamados superalimentos, pero hay que tener cuidado al cocinarlo. Como el miso es un alimento vivo, como el yogur, las bacterias beneficiosas mueren al hervirlo.
Información nutricional del miso
Cantidad por 100 gramos
- Calorías: 199
- Grasas totales: 6 g
- Ácidos grasos saturados: 1,1 g
- Colesterol: 0 mg
- Sodio: 3.728 mg
- Potasio: 210 mg
- Hidratos de carbono: 26 g
- Fibra alimentaria: 5 g
- Azúcares: 6 g
- Proteínas: 12 g
- Vitamina C: 0 mg
- Calcio: 57 mg
- Hierro: 2,5 mg
- Vitamina D: 0 IU
- Vitamina B6: 0,2 mg
- Vitamina B12: 0,1 µg
- Magnesio: 48 mg